Yo continuaré creyente
y aunque exista un abanico
de religiones, rubrico
que Jesús está presente.
Así lo niegue otra gente
no voy a polemizar
porque ahora entronizar
acostumbran a cualquiera
que tenga la billetera
repleta y sepa danzar.
Hoy la gran divinidad
del mundo es un gobernante
a quien le sigue un cantante
de mediana calidad.
También es una deidad
la modelo cotizada
y entre la gama variada
de dioses de carne y hueso
sobresale el ser avieso
que no cree en Dios ni en nada.
© 2009 Luis Bárcena Giménez
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