Dices que no tienes nada habiéndote dado todo y yo lo sé por el modo con que das cada mirada.

¡Nos haremos invisibles!


¡NOS HAREMOS INVISIBLES!

En resumen, no has visto
el esfuerzo con mi firma
negligencia que confirma
que yo para ti no existo.
Siendo así, para qué insisto
en que me des importancia
desde hoy pondré distancia
¡nos haremos invisibles!
porque no son compatibles
la humildad con la arrogancia.

Luis Bárcena Giménez

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.