EL HOMBRE Y SU REALIDAD
Es cierto que hay confusión
en el mundo y se difunde
pero el hombre se confunde
mucho más por presunción.
Pues si toda religión
nuestro respeto merece
el hombre olvidó parece
una cosa tan sencilla:
que ¡él! no es la maravilla
y ¡sólo Dios permanece!
Luis Bárcena Giménez
02 de octubre de 2011
Hermoso poema, amigo, el hombre a veces se olvida de que tenemos un punto y final, y que más vale aprovechar la vida, que quedarse dormido.
ResponderEliminarUn beso.
http://luisbarcenagimenez.blogspot.com/2010/03/dioses-de-carne-y-hueso.html
ResponderEliminarEn esta entrada publiqué hace tiempo algo al respecto.