“Trabajo de secretaria”,
así rezaba el cartel
que no era más que un papel
con grafías de primaria.
“Requisitos: ser falsaria,
joven, de buena presencia,
que tenga mucha elocuencia,
que sepa redactar poco,
que al jefe lo vuelva loco
y que llegue a la indecencia”.
Y proseguía el pasquín:
“tener cintura de avispa
y acompañados de chispa
un par de labios carmín.
Que no tenga retintín
y que no sea viroca;
la paga no será poca
ni el compañerismo nulo:
va a trabajar con el culo
y si quiere con la boca”.
© 2009 Luis Bárcena Giménez
P.D.:
ResponderEliminarAl pie del cartel decía,
con letra casi ilegible,
la señorita elegible,
será de categoría:
Diez puntos en alegría,
diez puntos en actitud,
diez puntos y prontitud,
diez puntos pa' los provechos,
diez puntos, dos buenos pechos,
diez puntos de juventud.
Muy buenas décimas, Luis.
Saludos, compañero.