Cuento de una mujer plástica con recursos económicos más implantes anatómicos que la hacen lucir fantástica.

Mina de crisólito

 


MINA DE CRISÓLITO


En un episodio insólito

con un infecto peruétano

le ha penetrado el tétano

en el pie a don Hipólito.

En la mina de crisólito

no hay asistencia médica...

y ya supo por la prédica

sarcástica como cínica

que volverá de la clínica

con una «pata» ortopédica.


Luis Bárcena Giménez

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