CASTILLO Y LA ESTANFLACIÓN
Castillo, gasta saliva
para odiar y no recula
y aunque su gestión es nula
su gestión es divisiva.
Como un barco a la deriva
el país está por él,
y además porque en tropel
junto con sus camaradas
dando grandes tarascadas
se está comiendo el pastel.
Luis Bárcena Giménez
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