SILENCIO SEPULCRAL
Joselín está lloroso
por la cuenta y por la diva
que lo dejó a la deriva
después de comer sabroso.
Él que decía animoso
que era en la capital
el vocero principal
de la feliz “hora loca”
ahora guarda en la boca
un silencio sepulcral.
Luis Bárcena Giménez
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.