¡Hay más de un esperpento hombre, marica y mujer, sin vergüenza creen ser la sensación del momento!

Condenado


CONDENADO

Tu pasión me ha condenado
a las sombras de la tarde
y a vivir cual un cobarde
que teme ser capturado.
Es el precio del pecado
convenido por los dos
y por el que dije ¡adiós!
al amor de mis amores
y la vida sin temores
con la bendición de Dios.

Luis Bárcena Giménez

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.