Para mi amiga Lisbeth

Mi amiga samaria Lisbeth Rangel Wisman, ¡profesora de verdad! que estuvo muchos años en la Sierra Nevada de Santa Marta, donde hay que tener coraje, escribió hace unos días en Facebook: “Quien no está en Facebook no existe”, es una opinión directa, como acostumbra a hablar, sino, ¡no sería ella! A mí siempre me ha gustado que me hablen sin rodeos y por eso admiro a su persona. Esto digo porque asumí instintivamente el compromiso de darle mi opinión (qué buenas controversias con Lisbeth y Omaira en Santa Marta).

Analicé y llegué a la conclusión de que “Quien no está en Facebook no existe”, es un verso octosílabo siempre que se pronuncie en inglés “Facebook”, por lo tanto ¡ya tenía el pie forzado! que me resultó un trabajo forzado su resolución. Muchas gracias mi amiga por ponerme a prueba.

QUIEN NO ESTÁ EN FACEBOOK NO EXISTE

Si yo pienso ¿luego existo?

me pregunto y me respondo

porque si existe Macondo

¡yo existo, como que hay Cristo!

Esto digo porque he visto

Lisbeth, lo que tú escribiste

en el muro y me tuviste

dándole vuelta al asunto

que es la oración que te adjunto:

Quien no está en Facebook no existe.

Luis Bárcena Giménez